Hacia
1981 la cofradía de Santa Ana debió iniciar los trámites para el reconocimiento
de su ermita con la consideración de Bien de Interés Cultural. En el acta de la
reunión de la cofradía del día 31 de agosto de 1981, se indicaba lo siguiente:
“El Sr. Presidente, D. Juan Vergara,
comunica que en fecha próxima visitará la Ermita de Santa Ana el Sr. Delegado
de la provincia en el Patrimonio artístico nacional (…) para conocer el estilo
de construcción de la ermita y el altar, al objeto de gestionar, si lo
mereciera, alguna ayuda económica o subvención, así como alguna posible
restauración que se considere necesaria (…). D. Gerardo Garrido expresa su
opinión de que debe llegarse a un acuerdo en todos los aspectos, sin perjuicio
del expediente que en su caso tramite el Ministerio de Cultura”.[1]
Placa con el nombre de la ermita. |
En 1984, el historiador y, a la
sazón, director de la Real Academia de la Historia, Antonio Rumeu de Armas (1912-2006) formuló
su aprobación formal para la declaración de la ermita como BIC en un artículo
publicado en el nº 181 de la revista
“Boletín de la Real Academia de la
Historia” (páginas 309-310):
“ERMITA Y PARAJE DE SANTA ANA, EN CENIZATE (ALBACETE)
En medio de un frondoso bosque de pinos enclavado en los
aledaños de la villa de Cenizate, provincia de Albacete, la devoción popular
erigió en el siglo XVIII la ermita de Santa Ana, imagen que es venerada por
todos los pueblos circundantes con ocasión de la festividad titular. Administra
sus bienes y atiende al culto la pertinente cofradía.
El edificio, en su exterior, es simple y sencillo, con atrio
y espadaña enjalbegados, sin nada digno de particular mención. La ermita, en su
interior, comporta mayor mérito. Se compone de una sola nave con lunetos,
crucero y cúpula de estilo neoclásico. El presbiterio y la cúpula se adornan
con decoración pictórica.
El Consejo Provincial de Bellas Artes de Albacete propone la
declaración de monumento histórico-artístico de carácter local, criterio con el
que se conforma el académico que suscribe.
ANTONIO RUMÉU DE ARMAS
(Aprobado en Junta de 15-VI-84)”
“Decreto 171/1991, de 8 de
octubre, por el que se declara Bien de Interés Cultural, con la categoría de
Monumento, a favor del inmueble correspondiente a la Ermita y Paraje de Santa
Ana en Cenizate (Albacete)”.
Placa con el título de Bien de Interés Cultural. |
Esta
declaración oficial se complementa con un anexo en el que se traza una breve
descripción histórico-artística y se define el área de protección del
monumento. En otra ocasión, valdrá la pena fijarse en las incorrecciones e
incongruencias contenidas en este anexo, pero, al presente, tan sólo nos
interesa destacar el valor de la consecución de este reconocimiento para
nuestra ermita.
En
consecuencia, en el Registro de Bienes Inmuebles de Interés Cultural catalogado
por el Ministerio de Educación y Cultura de España, figura inscrita la Ermita y Paraje de Santa Ana con la categoría de
Monumento con el código “(R.I.) - 51 - 0007117 – 00000”.
No
debemos olvidar que, en paralelo a la tramitación de este título para nuestra
ermita, se desarrolló el proceso de reconocimiento
como Bien de Interés Cultural para la iglesia parroquial de la Nuestra Señora
de las Nieves, incoándose su expediente el 30 de julio de 1982 y
obteniéndose su declaración como BIC el 30 de abril de 1991.
Asimismo,
debemos señalar que la cofradía acometió, en estos años de gestiones para su
reconocimiento como Bien de Interés Cultural, un proceso de reorganización que
cristalizó en unos nuevos Estatutos, aprobados por el Obispo de la Diócesis de
Albacete, Mons. D. Victorio Oliver Domingo, el 10 de mayo de 1991.
La
cofradía publicó, por aquellas fechas, un curioso opúsculo en el que se recogían
los antiguos estatutos, de 1709, y los nuevos, recientemente aprobados, junto
con la declaración de BIC para la ermita, el Himno de la Abuela Santa Ana y un
texto del cura local y, a la sazón, Presidente de la cofradía D. Juan Vergara
González titulado “Santa Ana: faro espiritual de Cenizate”.
En
cierta forma, con aquella publicación se coronaba un esfuerzo colectivo de una
década, de 1981 a 1991, que supuso una modernización de la cofradía y una
salvaguarda y reconocimiento para los valores artísticos de su ermita.
[1] Libro de Actas de la
Cofradía de Santa Ana iniciado en 1970 y consultado gracias a la gentileza de
Eulogio Cerrillo Ochando y Ricardo López López, anteriores Presidente y
Secretario de la cofradía respectivamente.