Viñeta de "Heraldo de Madrid", 22-12-1924. |
En
el presente artículo, nos proponemos glosar los ecos de prensa del sorteo
navideño de lotería de 1924, con cuyo primer premio resultaron agraciados
algunos vecinos de Cenizate. La cobertura periodística que se dio a los
resultados del sorteo de aquel año resultó amplísima, tanto en la prensa
madrileña como en provincias. Así, para nuestra documentación hemos podido
consultar una docena de rotativos nacionales, incluidas las ediciones de “El
Defensor de Albacete” y “El Diario de Albacete” para estas fechas de diciembre
de 1924. [1]
EL AMBIENTE EN TORNO AL
SORTEO DE 1924
La
razón de esta amplia cobertura informativa sobre el sorteo de lotería navideño
obedecía a la demanda de los lectores de la prensa en la época, según explicaba
Miguel de Unamuno en un texto de sus “Soliloquios y conversaciones” (1911): “Los crímenes, las consecuencias sangrientas
de las corridas de toros y la lista de lotería son los tres auxiliares de las
empresas periodísticas, pues todo vendedor o paquetero pide aumento cuando el
periódico trae lista, corrida o crimen”. [2]
Viñeta de "La Voz", 22-12-1924. |
En
el orden narrativo de todas las crónicas de prensa del evento navideño de 1924,
no faltaba la referencia preliminar al ambiente de expectación popular previo
al sorteo. Así, en “ABC”, se decía: “Con
motivo de la celebración del sorteo de la Lotería, desde muy temprano hubo gran
animación en las calles céntricas, estableciéndose numeroso público delante de
las carteleras de los periódicos y frente al Palace Hotel, donde había
colocado, en la parte superior del edificio, un potente altavoz”.
Asimismo,
en el diario “La Tierra” se describía el ambiente popular de la siguiente
manera: “Desde las últimas horas de la
noche de ayer la animación en los alrededores de la Casa de la Moneda era
extraordinaria. Numerosas personas, entre las que abundaban los golfillos y los
menesterosos, ocuparon sitio en las colas para luego venderlos a altos precios”.
EN BUSCA DE LOS
FAVORECIDOS POR EL NÚMERO 15.770
Las
crónicas coincidían en resaltar la circunstancia de que el primer premio de la
lotería, dotado con 15 millones de pesetas, había salido muy pronto, en torno a
las diez y cuarto de la mañana, recayendo en el número 15.770, que había sido
vendido en sendas administraciones madrileñas, la de la calle de Alcalá, número
2, y la de Esparteros, número 8.
Viñeta de ABC, 22-12-1924. |
Así,
en el diario “El Cantábrico”, se informaba con dramatismo del acoso
periodístico a la administración de la calle de Alcalá: “Una nube de periodistas y fotógrafos seguidos de numeroso público, se
dirigió a la Administración mencionada, que regenta doña Asunción Bassó. A
causa de la aglomeración de público ante
el establecimiento, y en el forcejeo que algunos hicieron para penetrar,
resultaron rotos los cristales del escaparate y las puertas, originándose
además otros destrozos”.
En
la crónica de “La Tierra” se cargaban todavía más las tintas en el alboroto
callejero provocado por periodistas y público curioso: “En cuanto se supo en Madrid que el número premiado con los quince
millones había sido vendido en la Administración de la calle de Alcalá, número
8, el público invadió el establecimiento y los alrededores. Fue tan grande la
aglomeración que se interrumpió la circulación de automóviles, coches y
tranvías, hasta que la fuerza pública intervino, haciendo circular a los
curiosos”.
Vigésimo de la lotería navideña de 1924. |
En
tan extremas circunstancias y a fuerza de presiones e insistencia sobre loteros
y vecinos, los intrépidos reporteros fueron componiendo la variopinta lista de agraciados
por el premio mayor del sorteo navideño de 1924. En la nómina de favorecidos
por el “gordo” de la lotería en aquel año desfilaba un extenso catálogo de
personajes galdosianos del Madrid del primer cuarto del siglo XX, compuesto de
miríadas de funcionarios, criadas, vendedores, menestrales y parroquianos de
tabernas.
Así,
la prensa se recreaba en casos de premiados como el del funcionario Samuel de
la Quintana, fallecido tres días antes del sorteo y cuya viuda, en un arrebato
de desesperación, quiso romper el boleto premiado. Los reporteros de la prensa,
implacables en sus pesquisas, fueron testigos de la dramática escena familiar,
según refiere el diario “El Cantábrico”: “Al
enterarse la viuda del señor Quintana que le había correspondido el premio
mayor, sufrió un ataque de nervios y quiso romper el vigésimo, diciendo que,
habiendo muerto su marido, no quería para nada el dinero. Los parientes
pudieron impedir que llevase a cabo sus deseos de inutilizar el vigésimo”.
Otro vigésimo de la lotería navideña de 1924. |
EL PREMIO GORDO VIAJA A
CENIZATE
Una
de las historias sobre agraciados del sorteo más repetidas en la prensa de 1924
se refería a la fracción del premio que fue a parar a Cenizate. En todas las
crónicas se encontraba, en efecto, un apartado dedicado a este desvío del
premio recaído en Madrid, con titulares como los siguientes: “Un vigésimo que se va en parte”, “El
‹‹gordo›› no ha caído en Madrid, sino en un pueblo de Albacete”, “Un vigésimo en Albacete”, “En la Dirección General de Seguridad estuvo
detenido otro vigésimo; pero se lo dejaron escapar a Cenizate”, etc.
Anuncio de "Casa Americana" en "La Lectura dominical", 4-6-1927. |
En
“ABC” se narraba la peripecia de esta participación cenizateña del primer
premio de la lotería en los siguientes términos: “El agente de Vigilancia D. José María García recibió encargo de su
hermano, D. Saturnino, residente en Cenizate (Albacete), de que le enviase un
vigésimo del sorteo de Navidad. Así lo hizo el Sr. García, enviándole uno del
15.770 que ha resultado premiado con el “gordo”, recibiendo una participación
de 10 pesetas, de las cuales D. José María García dio cinco de participación al
jefe de la Estafeta de la Dirección de Seguridad Sr. Verdegay, dos pesetas al
capitán de Seguridad Sr. Alegría, y otra peseta a una señora conocida suya, que
está en mala situación económica”.
Otro anuncio de "Casa Americana" en "Castilla", 27-4-1924. |
FIDEDIGNA Y REGOCIJADA
HISTORIA
Sin
duda, la nota de prensa más completa dedicada a los agraciados cenizateños de
1924 se publicó en el diario “La Libertad”. La crónica en cuestión estaba
encabezada con el cervantino titular de “Fidedigna y regocijada historia de un
afortunado vigésimo” y en su texto se decía lo siguiente:
“Don José Manuel
García nos dijo que él había adquirido un vigésimo del 15.770 por encargo de
unos hermanos suyos residentes en Cenizate (Albacete), quienes le habían dado
una participación de 10 pesetas.
-¿Qué hizo de ella?
-Pues bien sencillo; de las 10 pesetas he dado dos al capitán de Seguridad Sr. Alegría,
a cuya oficina estoy agregado como mecanógrafo; una al oficial de Correos de
servicio en la estafeta de la Dirección, D. Fernando Verdegay, regalo que le
hice para corresponder al servicio que me hizo enviando certificado el vigésimo
a Cenizate; también otra peseta a persona de mi afecto. Yo me he reservado seis
pesetas, que, como ustedes verán, no merecen la pena de especial atención. ¡Pobrecito!
-Ahora bien – agregó -, si ustedes quieren averiguar más
cosas pueden visitar a tres de mis hermanos en su oficina de la calle de
Carretas, 5. Por mi cuenta sólo puedo añadir que fui yo quien compró el
vigésimo.
Cuando llegamos a la calle de Carretas, 5, los hermanos de
José Manuel García habían abandonado la oficina y marchado a su domicilio, sito
en la Cava de San Miguel, núm. 8.
Al fin, en el piso tercero centro de la casa citada,
conseguimos aclarar el origen y el paradero del vigésimo que perseguimos. El
mayor de los hermanos, que se llama Andrés García López, comienza a hablar y
dice:
-Hace algún tiempo recibimos encargo de nuestra familia, que
reside en Cenizate, de adquirir un vigésimo. Lo compró José Manuel y lo envió
al pueblo; pero reclamamos de nuestros familiares una participación. José
Manuel recibió una participación de 10 pesetas, yo otras diez y cinco cada uno
de mis otros hermanos Modesto y Antonio, que me ayudan en mi negocio. Estamos
satisfechos de nuestra suerte – añade Andrés-. Ya veremos lo que ha ocurrido en
el pueblo. Yo supongo que allí se desbordará
la alegría. ¡Será la locura!
-¡Cómo!
-Sí; no se asombre; Cenizate es un pueblo de 200 vecinos,
donde se enterarán de que la Fortuna les ha favorecido cuando hoy vaya mi
hermano, porque allí no hay telégrafo y él llegará antes que el telegrama que les hemos enviado por la estación más
inmediata. Yo pensaba ir esta noche para recoger a mi esposa, que está allí;
pero he desistido. Irá mi hermano, como digo. Nadie supondrá ahora lo sucedido
y al verle llegar creerán que va sólo a recoger a mi esposa. ¡Cuando se
enteren!... ¡Figúrese! ¡En un pueblecito tan modesto, nada menos que un premio
gordo de Navidad! Es de suponer que mis hermanos Saturnino y José Manuel y el
resto de mi familia hayan pillado un buen “pellizco” en el “gordo”.
Como dato curioso, creemos necesario decir que en los
balcones de las oficinas de los señores García López, de la calle de Carretas,
se colgó un cartel, en el que se leía en gruesos y rojos caracteres: “El gordo
está aquí”.
-¡Que aproveche! – decían melancólicamente los transeúntes-.
Y continuaban subiendo la cuesta a pie y sin dinero”.
CONCLUSIÓN
De
esta forma, según las noticias publicadas en la prensa del momento, de las 100
pesetas del vigésimo premiado, sendas participaciones de 10 pesetas habían
correspondido inicialmente a cada uno de los hermanos JOSÉ MARÍA GARCÍA (también nombrado, a veces, como José Manuel García,
empleado de la Dirección General de Seguridad, sita en la Casa de Correos de la
Puerta del Sol) y ANDRÉS GARCÍA (propietario
de una tienda de máquinas de escribir ubicada en la céntrica calle de
Carretas); asimismo, sendas participaciones de cinco pesetas habían recaído en
los hermanos MODESTO GARCÍA y ANTONIO GARCÍA (ambos ayudantes de
“Casa Americana”, que es como se llamaba el comercio mecanográfico de Andrés).
Las 70 pesetas restantes, en principio, serían la parte correspondiente al quinto
de los hermanos citados, SATURNINO
GARCÍA, residente en Cenizate.
Ignoramos
si esta participación habría sido fraccionada, a su vez, entre vecinos y
familiares por parte de este último hermano. En el “Diario de Valencia” se
afirmaba que el premio había sido repartido entre la mayoría de los vecinos y
se citaba el nombre de un hermano más, llamado Emilio García: “El Ayuntamiento adquirió el billete entero
en Madrid, repartiéndolo entre los concejales y la mayoría de los vecinos. El
joven don Emilio García, que jugaba una participación de 50 pesetas, remitió a
su novia, que reside en Valencia, una participación de cinco pesetas,
correspondiéndole pesetas 37.500”.
La
citada crónica del “Diario de Valencia” concluía afirmando que no había sido la
primera ocasión que había recaído el primer premio navideño en nuestra modesta
población albaceteña: “Se da el caso
curioso de que al pueblo de Cenizate ha correspondido el premio gordo de
Navidad varias veces”. Dejamos para otra ocasión la investigación relativa
a estas otras felices ocasiones en que el “gordo” de la lotería navideña vertió
sus dones entre nuestros antepasados.
[1] Ediciones de 22 de diciembre de 1924 para El Heraldo
de Madrid y La Voz; y de 23 de diciembre
de 1924 para ABC, El Liberal, La Libertad, La Tierra, Diario de Valencia., El
Cantábrico, La Atalaya, etc. Ediciones del mes de diciembre de 1924 para El
Diario de Albacete y El Defensor de Albacete.
[2] Miguel de Unamuno, “Soliloquios y conversaciones”,
1911. “Publico y prensa”, página 216.
[3] Titulares respectivamente de ABC, Diario de Valencia,
La Atalaya y El Liberal
[4] Con idéntico domicilio de José María García López, se
censan también Clemencia García López y Rosalía García López (ambas sus
labores, de 45 y 47 años respectivamente)